"Estamos intentando hacer algo con Irán", ha declarado Trump al respecto de la reunión, que se ha producido bajo el marco de las negociaciones sobre un nuevo acuerdo nuclear con Irán.
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, mantendrá una reunión de seguridad mañana miércoles tras una llamada con el presidente estadounidense, Donald Trump. Los medios de comunicación israelíes afirman que la llamada entre Trump y Netanyahu duró unos 40 minutos y que ambos hablaron de varios temas, desde la invasión en Gaza hasta la evolución del acuerdo nuclear con Irán.
Trump no ofreció muchos detalles sobre la llamada, pero dejó caer que ambos se centraron principalmente en su principal enemigo estratégico y militar en Oriente Medio, Teherán. "Ya veremos qué pasa. Estamos intentando hacer algo con un país del que acabamos de hablar, Irán", declaró Trump.
El presidente advirtió de que un enfoque violento de EE.UU. hacia Teherán no estaba descartado. "A veces pueden ser demasiado duros. Ese es el problema. Así que estamos intentando llegar a un acuerdo para que no haya destrucción ni muerte. Se lo hemos dicho y espero que así sea".
En la reunión de seguridad con Netanyahu, según los medios de comunicación israelíes, participarán el ministro de Defensa, Israel Katz, el presidente del partido ultraortodoxo Shas, Aryeh Deri, y el ministro de Asuntos Estratégicos, Ron Dermer.
Entre las figuras que también participarán en la reunión se encuentran el ministro de Seguridad Nacional, Itamar Ben Gvir, y el ministro de Finanzas, Bezalel Smotrich, del partido ultraderechista Sionismo Religioso. Ben Gvir y Smotrich no suelen participar en este tipo de reuniones de alto nivel. Ambos iban a ser requeridos por crímenes de guerra por parte de la Corte Penal Internacional, la cual ya ha pedido la detención del propio Netanyahu y su exministro de Defensa, antes de la renuncia de su fiscal jefe, Karim Khan.
La reunión se produce en medio de las negociaciones con Washington sobre un posible acuerdo nuclear. Al parecer, EE.UU. ha propuesto permitir que Teherán siga enriqueciendo uranio, pero a niveles bajos y durante un periodo de tiempo limitado; una licencia que se pausaría cuando se establezca un consorcio para el enriquecimiento de uranio para Irán y otros países. Se espera que Teherán rechace esta propuesta.