"Si se instalan de forma masiva, los tejados fríos pueden reducir significativamente la temperatura del aire a nivel del suelo de una ciudad", afirma el autor principal de la investigación.
PUBLICIDADPintar los tejados de Londres de blanco podría haber salvado cientos de vidas durante el verano récord de calor de 2018, según un nuevo estudio. La temperatura media de junio a agosto de ese año fue de 19,2°C, alrededor de 1,6°C más alta de lo habitual para esa época del año.
Investigadores del University College London (UCL) y la Universidad de Exeter descubrieron que la instalación de tejados fríos y de colores claros en todos los tejados de Londres podría haber enfriado la ciudad alrededor de 0,8°C. Afirman que esto habría evitado la muerte de unas 249 personas o el 32% de las 786 muertes relacionadas con el calor que se produjeron en Londres en junio, julio y agosto de 2018.
"Si se instalan de forma masiva, los tejados fríos pueden reducir significativamente la temperatura del aire a nivel del suelo de una ciudad", afirma el autor principal, Charles Simpson, de la Escuela de Medio Ambiente, Energía y Recursos Bartlett de la UCL. "El efecto de enfriamiento resultante en toda la ciudad salvaría vidas y mejoraría la calidad de vida de los residentes en toda el área urbana".
Según los autores del estudio, cubrir todos los tejados de Londres con es solares también ayudaría a reducir las muertes relacionadas con el calor y, al mismo tiempo, generaría energía. Los investigadores descubrieron que esto podría haber enfriado la ciudad alrededor de 0,3°C, lo que evitaría la muerte de 96 personas, el 12% de las muertes relacionadas con el calor que ocurrieron ese verano.
Durante este periodo de tres meses, estos es solares también habrían generado 20 teravatios-hora (TWh) de electricidad, lo que representa más de la mitad del uso de energía de Londres durante todo el año 2018. "Los es solares tienen grandes beneficios como fuente de energía renovable, por lo que es bueno ver que no harán que la ciudad sea más calurosa", agrega Simpson.
¿Cómo funcionan los techos frescos y de colores claros?
Encontrar formas de enfriar las ciudades es cada vez más importante a medida que el mundo se calienta y más de la mitad de la población mundial vive en áreas urbanas. Los veranos calurosos como el que vimos en 2018, aunque raros en ese momento, se están volviendo más comunes debido al cambio climático. El verano de 2024 fue el más caluroso registrado después del verano récord de 2023.
El Reino Unido es particularmente vulnerable, ya que se estima que el 83% de la población vive en áreas urbanas. Los entornos urbanos absorben mucho calor y suelen ser unos pocos grados más cálidos que la región circundante. Un efecto conocido como "isla de calor urbana" hace que los edificios, las carreteras y otras infraestructuras absorban y vuelvan a emitir el calor del sol más que los paisajes naturales, lo que hace que las ciudades sean más cálidas.
Los tejados blancos son una imagen habitual en los países más cálidos del sur de Europa y el norte de África. Los tejados de colores claros absorben menos energía radiante del sol que los tradicionales tejados de colores oscuros, lo que podría contribuir a mantener las ciudades más frescas y las temperaturas en el interior de los edificios más bajas.
"La necesidad de que nuestras ciudades se adapten al cambio climático es evidente. Cambiar los espacios de los tejados ofrece una posible solución", afirma el profesor Tim Taylor, de la Universidad de Exeter, coautor del estudio.
"Necesitamos fomentar acciones como ésta para reducir la carga del exceso de calor sobre las personas que viven en zonas urbanas y aprovechar los posibles beneficios colaterales, incluida la generación de energía".