Los 'influencers' ultraderechistas están acusados de proxenetismo y violencia sexual en Rumanía, entre otros cargos. Trump no reconoce presiones para que la Fiscalía rumana les dejase salir del país.
Los hermanos influencers y figuras de la ultraderecha online, Andrew y Tristan Tate, acusados de tráfico de personas, proxenetismo y violencia sexual en Rumanía, han llegado a Estados Unidos después de que las autoridades de Bucarest levantaran sus restricciones de viaje.
Los hermanos aterrizaron en Florida el pasado jueves. Los Tate, con doble ciudadanía estadounidense y británica, fueron arrestados a finales de 2022 acusados de participar en una red que atraía a mujeres a Rumanía con el fin de explotarlas sexualmente. Andrew Tate también ha sido acusado por violación. Ambos hermanos niegan los cargos.
En diciembre, un tribunal dictaminó que el caso no podía ir a juicio debido a múltiples irregularidades legales y procesales por parte de los fiscales. Sin embargo, el caso permaneció abierto. La agencia anticrimen organizado de Rumanía, DIICOT, publicó en un comunicado que los fiscales habían aprobado el cambio en las restricciones de viaje a los Tate. Los hermanos aún deben comparecer ante las autoridades judiciales cuando sean citados. "Se ha advertido a los acusados de que violar deliberadamente estas obligaciones puede resultar en que el control judicial sea reemplazado por una medida de privación de libertad más estricta", dice este comunicado.
Tras la llegada de los influencers a Florida, el fiscal general del estado, James Uthmeier, publicó en redes sociales que su oficina llevaría a cabo una "investigación preliminar" sobre ellos. "Florida tiene tolerancia cero con la trata de personas y la violencia contra las mujeres. Si alguno de estos presuntos delitos va en contra de la jurisdicción de Florida, los haremos responsables", ha dicho Uthmeier, designado por el gobernador republicano, Ron DeSantis.
En declaraciones a los periodistas en el aeropuerto, Andrew Tate ha insistido en que él y su hermano no han hecho nada malo. "Vivimos en una sociedad democrática donde se es inocente hasta que se demuestre lo contrario. Y creo que mi hermano y yo somos en gran medida incomprendidos", ha asegurado.
La Fiscalía rumana levanta los bienes incautados de los Tate
Estas no son las únicas buenas noticias para estos líderes de opinión de la 'manosfera', la burbuja online para 'incels' y hombres ultraderechistas en Internet. Un tribunal rumano ha fallado a favor de una apelación de los Tate para levantar la incautación de varios de sus activos, según ha asegurado la portavoz de los acusados, Mateea Petrescu.
Sus bienes incluyen seis vehículos de lujo, terrenos, propiedades y acciones de sus empresas. Todas sus cuentas bancarias previamente congeladas han sido desbloqueadas, ha dicho. "Si bien algunos activos permanecen bajo incautación preventiva, este fallo marca un paso significativo hacia la justicia", ha dicho Petrescu.
Andrew Tate, de 38 años, un exkickboxer profesional y autodenominado misógino que ha acumulado más de 10 millones de seguidores en X, ha afirmado repetidamente que los fiscales en Rumania no tienen pruebas en su contra y que existe una conspiración política para silenciarlo. Él y Tristan Tate, de 36 años, son partidarios declarados del presidente estadounidense Donald Trump. Hace solo unas semanas, Andrew Tate publicó en X lo siguiente: "Los Tate serán libres, Trump es el presidente. Los buenos viejos tiempos han vuelto. Y serán mejores que nunca. Esperad".
El regreso de los Tate a Estados Unidos se produce tras unas declaraciones del ministro de Asuntos Exteriores rumano, Emil Hurezeanu, en las que aseguraba que la istración Trump había expresado interés en el caso de los hermanos en la reciente conferencia de seguridad de Múnich.
El ministro insistió en que no se ejerció ninguna presión para levantar las restricciones a los Tate, después de que un informe del 'Financial Times' sobre este tema causara polémica en Rumanía. Cuando se le preguntó si su istración presionó al Gobierno de Rumanía para que liberara a los Tate, Trump declaró ante los periodistas este jueves en el Despacho Oval que no sabía nada sobre las circunstancias.
La decisión del Tribunal de Apelación de Bucarest de que el caso Tate no podía seguir adelante supone un gran revés para la DIICOT, pero no significa que los acusados estén libres, ya que el caso aún no se ha cerrado. El pasado mes de agosto, la DIICOT abrió un segundo caso contra los hermanos, investigando acusaciones de trata de personas, tráfico de menores, relaciones sexuales con un menor o blanqueo de dinero, entre otros cargos también negados por los Tate.
Después de su arresto en 2022, los creadores de contenido estuvieron detenidos durante tres meses antes de pasar a tener un arresto domiciliario. Posteriormente, sus movimientos fueron restringidos al municipio de Bucarest y al cercano condado de Ilfov, y más tarde a la totalidad de Rumanía.
Andrew Tate fue puesto nuevamente bajo arresto domiciliario el año pasado tras este segundo caso que afloró, pero dicha medida se levantó el mes pasado.
Las batallas legales de los hermanos Tate no se limitan a Rumanía.
Además de sus investigaciones en Rumanía y los hipotéticos cargos que los fiscales de Florida podrían levantar contra ellos, cuatro mujeres británicas han acusado a Andrew Tate de violencia sexual y abuso físico. Sin embargo, la Fiscalía inglesa ha decidido no procesar el caso.
Las mujeres han asegurado en una declaración conjunta que están "incrédulas y se sienten nuevamente traumatizadas" ante la noticia de que se levantaron las restricciones de viaje de los hermanos. Matthew Jury, el abogado que representa a estas mujeres, calificó la decisión de levantar la prohibición de viajar como "repugnante y desalentadora".