El principal partido de la oposición recrimina al primer ministro eslovaco un acercamiento de posturas con Rusia y le acusa de intentar sacar al país de la UE. Fico ha rechazado las afirmaciones que apuntan a un cambio de orientación de la política exterior del país.
El primer ministro de Eslovaquia, Robert Fico, acusó este jueves a la oposición de intentar "organizar un golpe de Estado", en medio de una escalada de manifestaciones contra su supuesta postura favorable a Moscú y de una petición de moción de censura en el Parlamento.
Durante su discurso ante el Parlamento eslovaco, Fico también rechazó las afirmaciones sobre el supuesto cambio de orientación de la política exterior del país y reafirmó su pertenencia tanto a la UE como a la OTAN.
Aunque Fico afirmó que su Gobierno no tomaría ninguna medida en relación con el derecho constitucional a reunirse y organizarse, denunció la existencia de una "estructura" que quiere abusar de las protestas para escalar las tensiones.
"Vemos una estructura que quiere explotar estas reuniones y estas concentraciones principalmente para un posible enfrentamiento con las fuerzas de seguridad del Estado", dijo. "Incluso hay medidas que pretenden interrumpir la capacidad del Gobierno de la República Eslovaca para hacer su trabajo", agregó.
"Es un intento de organizar un típico golpe de Estado en Eslovaquia para que caiga el Gobierno y lleguen al poder quienes no pueden acceder a él mediante elecciones parlamentarias democráticas", añadió.
Recientemente, Fico ha sido acusado por sus oponentes de intentar sacar al país de la UE. El martes sobrevivió a un intento de la oposición de presentar una moción de censura en el Parlamento eslovaco, después de que sus oponentes abandonaran el debate en protesta por los intentos de que la sesión fuera parcialmente privada.
Disturbios en Eslovaquia por los vínculos de Fico con Moscú
Las declaraciones de Fico se producen mientras continúan las protestas en Eslovaquia por sus vínculos con Rusia. Las manifestaciones comenzaron el pasado diciembre, después de que Fico viajara a Moscú para visitar al presidente ruso, Vladímir Putin.
Fico también ha amenazado con recortar la ayuda económica a los más de 130.000 refugiados ucranianos que viven en Eslovaquia, después de que Kiev decidiera interrumpir el suministro de gas ruso a Eslovaquia a través de su territorio.
Fico se ha mostrado crítico con la OTAN y la UE, y ha sugerido que Bruselas amplíe su sistema de votación por mayoría para cubrir más áreas y limitar el poder de los vetos nacionales.
El primer ministro volvió al poder el año pasado después de que su partido, el Smer, ganara las elecciones parlamentarias con una plataforma populista, que incluía en su programa puntos como el cese de toda ayuda a Ucrania, que sigue defendiéndose de la invasión a gran escala de Rusia, ya en su tercer año. Durante su mandato, Fico ha prometido bloquear la entrada de Kiev en la OTAN y ha condenado las sanciones de la UE a Rusia.