Según Save the Children, se produjo una media de 76 violaciones graves de derechos contra los niños en zonas de conflicto en 2022, un 13% más que el año anterior.
PUBLICIDADEl número de violaciones de derechos humanos graves cometidas contra los niños y las niñas en tiempos de guerra aumentó un 13% en 2022, hasta alcanzar el nivel más alto desde que comenzaron a elaborarse informes en 2005, según un nuevo informe de Save the Children, y se espera que las cifras de abusos en 2023 aumenten todavía más.
El informe 'Stop the War on Children: Dejemos que los niños vivan en paz' muestra que en 2022 se cometieron 27.638 violaciones graves contra la infancia en zonas de conflicto. El asesinato y la mutilación de niños y niñas suponen el mayor número de casos denunciados y verificados (8.647). Le siguieron los casos de reclutamiento y utilización de niños en conflictos, que aumentaron un 20%, hasta 7.610 en 2022.
Según Save the Children, estas agresiones "representan los peores crímenes que pueden cometerse contra la infancia que vive en zonas de conflictos, desde asesinatos, mutilaciones, secuestros y violencia sexual hasta reclutamiento en grupos armados y ataques a escuelas y hospitales".
Una tendencia que empeorará en 2023
La directora general de Save the Children Internacional, Inger Ashing, afirmó este jueves que, si bien estas cifras son devastadoras, se espera que la tendencia empeore en 2023 debido al conflicto en Sudán, que es actualmente la peor crisis de desplazamiento de niños del mundo, y a los continuos bombardeos en Gaza.
"Es un momento terrible para crecer en guerra. Las normas mundiales que se establecieron para proteger a la infancia de lo peor que se podía cometer contra ella se están desmoronando", dijo Ashing. "Las tendencias van en la dirección equivocada: las violaciones de los derechos de los niños y las niñas aumentan año tras año", añadió.
La punta del 'iceberg'
Save the Children también afirma estas cifras sólo representan una pequeña parte del número total de casos, ya que algunos abusos nunca se denuncian, mientras que otros cometidos en 2022 todavía se están verificando.
Actualmente, uno de cada seis niños y niñas, aproximadamente 468 millones, viven en zonas de conflicto, y corren hoy más riesgo de sufrir daños que en cualquier otro momento de los últimos 20 años.
Según el análisis de Save the Children, la República Democrática del Congo fue el peor país afectado por un conflicto para ser niño en 2022, seguido de Malí en segundo lugar y, a continuación, Birmania (Myanmar). Otros de los países más afectados por conflictos son Afganistán, Burkina Faso, Nigeria, Somalia, Siria, Ucrania y Yemen.