Los ministros de Exteriores de Chipre, Italia, Francia, Egipto y Grecia. intentan evitar que la guerra tenga ramificaciones.
PUBLICIDADUn acuerdo que ponga freno a la violencia. Ese el mensaje anticipado para las partes enfrentadas en Libia de los ministros de Exteriores de Grecia, Chipre, Francia e Italia que están en Egipto. La reciente escalada de violencia en el país norafricano ha hecho saltar las alarmas especialmente ahora que Turquía ha empezado a desplegar sus tropas para respaldar a uno de los contendientes.
Libia está regida por dos Gobiernos: el del este, apoyado por Emiratos Árabes, Egipto y Rusia y el de Trípoli, que tiene el respaldo de la ONU y recibe ayuda de Turquía, Qatar e Italia. El martes el responsable de la diplomacia de este último país, Luigi Di Maio, ya expresó sus preocupaciones: "Libia representa una amenaza para Europa también por el terrorismo. Se trata de una guerra subsidiaria. Todas las interferencias deben cesar. Hay muchos países que intervienen en la guerra civil convirtiéndola en una guerra subsidiaria."
Una cosa es proporcionar ayuda, pero en noviembre Ankara firmó un acuerdo de cooperación militar y de seguridad y otro de jurisdicción marítima con el gobierno de Trípoli. El presidente Erdogan ha comenzado a desplegar sus tropas para contrarrestar los logros militares de las fuerzas leales al comandante general Jalifa Haftar. Pero Europa considera que con el empeoramiento de los combates en Libia, la solución tiene que ser la negociación política.
Mientras tanto, el presidente egipcio Abdelfatá al Sisi también ha expresado su preocupación, criticando los acuerdos de Turquía con Trípoli, calificando su intervención militar como "un asunto de seguridad nacional egipcia". El Cairo está mostrando músculo diplomático al ser anfitrión de la reunión de hoy. El encuentro sea posiblemente más efectivo que la iniciativa liderada por Europa, una cumbre sobre la crisis en Libia que todavía no tienen fecha.