Más allá de la grandeza medieval del casco histórico de Valencia, se trata de una ciudad verdaderamente moderna, definida por extensos paseos botánicos, un diseño vanguardista e iniciativas ecológicas visionarias.
Sin embargo, si nos adentramos en la región más amplia de Valencia, el tiempo parece retroceder. Desde las bodegas de Requena hasta el castillo de Chulilla, no faltan excursiones históricas de un día desde Valencia, que ofrecen una inmersión total en el rico patrimonio arqueológico, cultural y natural de España.
Hoy ponemos rumbo a Sagunto, una antigua ciudad fortaleza a sólo 30 kilómetros de Valencia, donde los ecos del imperio y las ricas tradiciones culinarias se remontan a miles de años.
Valencia: donde el futuro surge del pasado
Bajo un horizonte digno de ciencia ficción, Valencia vibra con el legado de su pasado mercantil. La Lonja de la Seda, obra maestra del gótico reconocida por la UNESCO, aún rezuma la riqueza y la ambición de los comerciantes que la construyeron en el siglo XV. Mientras tanto, los valencianos de hoy comercian con sus productos en el vibrante Mercado Central, donde se pueden encontrar cítricos frescos, jamón ibérico y la tradicional horchata (una bebida cremosa de chufa).
Además de celebrar su pasado, Valencia también apuesta por el descubrimiento y la reinvención. Es el hogar de uno de los monumentos contemporáneos más reconocibles de Europa: la Ciudad de las Artes y las Ciencias, un complejo que alberga varias obras futuristas del arquitecto local Santiago Calatrava, así como un planetario, un parque oceanográfico y un museo interactivo.
Puedes desplazarte fácilmente entre el pasado y el presente de Valencia a través de los senderos del Jardín del Turia. Tallado a partir del cauce desviado de un río y serpenteando nueve kilómetros a través del corazón de Valencia, el Jardín del Turia ofrece una escapada verde para ciclistas, corredores y cualquiera que necesite un rincón con sombra en plena naturaleza.
Sagunto: una excursión de un día en el tiempo desde Valencia
Mientras Valencia se reinventa, en Sagunto las tradiciones se mantienen firmes.
En el corto trayecto desde Valencia, viajarás a través de siglos de historia española y llegarás a la enorme fortaleza en la cima de una colina que ha vigilado la costa mediterránea durante milenios.
Disfruta de las vistas panorámicas de las murallas derruidas de la ciudad y camina por los senderos irregulares del interior para encontrar restos de foros romanos, fortificaciones moriscas y sistemas de agua subterráneos que una vez abastecieron a comunidades enteras. El Teatro Romano , excavado en la ladera de la colina en el siglo I, aún acoge representaciones, incluidas las del festival Sagunt a Escena en verano, cuando obras grecolatinas, música, danza y espectáculos de circo dan vida al antiguo teatro.
Los ecos del pasado resuenan en el casco antiguo de Sagunto. Las estrechas calles encaladas del barrio judío preservan un capítulo menos conocido de la historia de España, mientras que el Portal de la Judería, una puerta de a la que fue una próspera comunidad medieval, actúa como un contrapunto silencioso a la grandeza del castillo que la domina, con una historia igualmente perdurable.
En cuanto a patrimonio natural, el litoral de Sagunto ofrece una gran variedad. Las playas de la ciudad se extienden a lo largo de 13 kilómetros, flanqueadas por dunas y bosques de pinos. Entre ellos, Puerto de Sagunto, Almardá y Corinto cuentan con el distintivo de Bandera Azul y ofrecen una alternativa más tranquila a la animada Malvarrosa de Valencia. Por otra parte, los humedales protegidos de La Marjal dels Moros ofrecen un lugar ideal para la observación de aves, mientras que la proximidad de los parques naturales de Sierra Calderona y Sierra de Espadán atrae a los senderistas por senderos costeros y de montaña.
Una muestra del patrimonio valenciano en Sagunto
Si bien la región valenciana es mundialmente famosa por su tradicional paella,* en Sagunto destacan platos como el arroz a banda (arroz cocido lentamente en caldo de pescado) y el arroz negro (arroz teñido con tinta de calamar), que hablan del pasado marítimo de la ciudad.
Otras especialidades locales combinan productos de la huerta y del mar, como los ximos (panecillos fritos), la coca de tomate (tarta de tomate) y la coca de llanda (bizcocho de aceite de oliva y limón).
Tras un día de visita al castillo, disfruta como la realeza española en el restaurante Arrels, galardonado con una estrella Michelin y situado bajo los arcos góticos del Palacio de los Duques de Gaeta, del siglo XVI. Una paella tradicional de marisco a orillas del puerto es igualmente digna de mención, un auténtico testimonio de la larga trayectoria culinaria de Sagunto.
Planifica tu viaje
Sagunto está muy bien comunicado por tren desde el centro de Valencia. Es una excursión fácil de un día, pero hay muchas razones para prolongar la estancia.
Con más de 300 días de sol al año, ambas ciudades son destinos durante todo el año. Para sumergirse aún más en el patrimonio valenciano, piensa en visitarlas durante una fiesta local tradicional. Celebra las Fallas y la llegada de la primavera en Valencia en marzo con arte, hogueras y fuegos artificiales, mientras que la Semana Santa de abril está marcada por extravagantes procesiones callejeras en Sagunto.
Unas vacaciones valencianas para recordar
Aunque están separadas por un corto trayecto, Valencia y Sagunto, juntas, trazan un recorrido a través de los siglos.
Ya sea explorando los centros comerciales medievales de Valencia, viendo una obra de teatro en el teatro al aire libre de 2.000 años de antigüedad de Sagunto o simplemente degustando los sabores tradicionales con vistas al Mediterráneo, tu recorrido por el patrimonio de Valencia será una experiencia inmersiva de viaje en el tiempo como ninguna otra.
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