Como actores importantes de la industria de viajes, las líneas de cruceros tienen la responsabilidad no solo de operar de manera sostenible, sino también de liderar los esfuerzos globales para el futuro desde la vanguardia de la innovación marítima.
El último informe de sostenibilidad de la Asociación internacional de líneas de cruceros (CLIA) describe las formas en que la industria de los cruceros se dirige hacia un futuro más sostenible y cómo planea alcanzar las cero emisiones netas para 2050.
Tratados ampliamente ratificados como MARPOL (Convenio internacional para la prevención de la contaminación procedente de los buques) han impulsado la reducción de los gases de efecto invernadero en todo el mundo, pero los de la CLIA están comprometidos a ir más allá de los requisitos del MARPOL, introduciendo nuevas tecnologías y prácticas que les permitirán reducir las emisiones de carbono en un 40 por ciento para 2030.
Energía más limpia para un futuro mejor
Promover la innovación en la tecnología marítima ocupa un lugar central en las iniciativas del sector de cruceros para reducir su huella ambiental. Ha realizado importantes inversiones en el desarrollo de tecnologías y prácticas sostenibles, incluyendo, por ejemplo, el suministro de electricidad en tierra para los buques. Si un barco atracado se puede conectar directamente a una fuente de energía, los motores pueden apagarse, lo que reduce las emisiones hasta en un 98 por ciento.
En la actualidad, solo el dos por ciento de los puertos del mundo disponen de suministro en tierra, pero el 46 por ciento de los cruceros están listos para conectarse. El otro 30 por ciento se puede modernizar.
Otra de las áreas clave de desarrollo es la de los combustibles marinos sostenibles. Al trabajar con fabricantes y otros, las líneas de cruceros están explorando varias alternativas a los combustibles tradicionales, buscando reducir su dependencia de los combustibles fósiles y hacer la transición hacia energías más limpias.
La Organización marítima internacional pide un aumento del cinco al diez por ciento en la adopción de combustibles alternativos en toda la industria marítima para 2030, pero aún no se dispone de combustibles sostenibles a gran escala. Una mayor disponibilidad de nuevos combustibles en los puertos de todo el mundo requiere medidas urgentes por parte de los gobiernos para invertir en la infraestructura necesaria.
Otros retos incluyen las propiedades de almacenamiento de diferentes combustibles (algunos requieren más espacio de combustible que otros, lo que afecta su viabilidad para uso marítimo) y una serie de aspectos de seguridad.
Se están explorando diversas fuentes de energía nuevas y alternativas, como los biocombustibles elaborados a partir de material vegetal y desechos animales; 'electrocombustibles' sintéticos (elaborados con dióxido de carbono capturado), como e-metano y e-metanol; baterías eléctricas e híbridas; gas natural licuado (GNL) biológico y sintético; pilas de combustible de metanol e hidrógeno; energía eólica y solar.
Los experimentos exitosos en este campo hasta ahora incluyen un viaje con cero emisiones de GEI completado por el MSC Euribia propulsado por GNL en junio de 2023. Esto fue posible gracias al uso de GNL biológico mediante un enfoque de balance de masas. MSC está utilizando los datos de esta prueba para optimizar más barcos de su flota, reduciendo sus emisiones y, como resultado, avanzando hacia sus objetivos de descarbonización.
Otra área con enorme potencial es el campo del uso de metanol. Si se adopta como única fuente de energía, el metanol verde (como el biometanol o el e-metanol) es capaz de convertir cualquier viaje en un trayecto casi sin emisiones de carbono.
Como combustible alternativo, el metanol ya ha sido probado y estudiado rigurosamente, por lo que las consideraciones de seguridad y abastecimiento de combustible ya se han documentado. Esto facilitará su disponibilidad a gran escala y ya ha comenzado la construcción de buques preparados para el metanol. TUI Cruises, Celebrity Cruises, Disney Cruise Line y Norwegian Cruise Line están preparando siete barcos para viajes propulsados por metanol.
Estos estarán operativos en 2028, momento en el que también habrá 41 barcos diseñados para GNL fósil, todos los cuales podrán adaptarse fácilmente para GNL respetuosos con el medioambiente cuando estén ampliamente disponibles.
Otros programas piloto incluyen 26 barcos que están probando biocombustibles y combustibles de carbono sintético y también se están probando y testando pilas de combustible de hidrógeno y metano, energía fotovoltaica y energía aeólica.
El papel del diseño de buques en la eficiencia energética
Junto con la carrera por encontrar combustibles más limpios, están las iniciativas para hacer que los motores y los barcos sean más eficientes energéticamente. Los buques preparados para el futuro que se encuentran actualmente en construcción son una parte fundamental para alcanzar los objetivos de emisiones. Los cruceros tienen una vida útil media de unos 30 años, pero la tecnología marítima cambia todo el tiempo. Detectar potenciales innovaciones se ha convertido en clave para el diseño de buques, junto con la incorporación de los últimos avances en tecnología.
Estos desarrollos incluyen iluminación inteligente y sistemas eficientes de calefacción, ventilación y aire acondicionado, junto con una mejor gestión de residuos. Las líneas de cruceros están invirtiendo de forma considerable en sistemas avanzados de tratamiento de aguas residuales, que son considerablemente más eficientes que el uso de plantas de tratamiento en tierra. La energía residual, producto incluso de los motores más eficientes, también puede capturarse. Las líneas de cruceros han comenzado a instalar intercambiadores de calor que convierten el vapor generado por los motores en agua dulce para duchas, piscinas, cocinas y para calentar cabinas.
Los sistemas integrados de lubricación por aire se introducen cada vez más en el diseño de los cruceros. Esto canaliza el aire hacia la parte inferior del casco, creando burbujas de aire microscópicas que reducen la resistencia, conservando energía y contribuyendo a la eficiencia del combustible.
El diseño del casco en sí también es clave para reducir la resistencia de la ola de proa, junto con la pintura antiincrustante. Estos han mejorado enormemente en los últimos años, con pinturas, barnices y revestimientos a base de silicona respetuosos con el medioambiente ya disponibles.
Junto con la tecnología física, el software también ha jugado un papel clave en la descarbonización dentro de la industria de los cruceros. El software utilizado para optimizar el combustible y la eficiencia energética ha tenido un impacto significativo en las emisiones de carbono, al igual que los sistemas de seguimiento que, por ejemplo, ayudan a encaminar a los barcos para aprovechar la energía de las corrientes. Las tecnologías digitales recopilan y analizan datos sobre velocidad, rutas, rendimiento del motor y datos de emisiones y los transmiten a la tripulación operativa.
Trabajando juntos hacia el cero neto
La industria de los cruceros no puede lograr sus objetivos de descarbonización por sí sola y las líneas de CLIA colaboran con los gobiernos, la UE, los proveedores de combustible y las empresas de tecnología, que son clave para desarrollar soluciones que mejoren la eficiencia energética de los cruceros.
Los gobiernos también desempeñan un papel crucial en el establecimiento del marco regulatorio para apoyar la producción, distribución y uso de combustibles renovables. El trabajo de la CLIA con los gobiernos incluye la promoción de políticas que promuevan la tecnología verde, la reducción de emisiones y diseños de barcos energéticamente eficientes.
Esto incluye un más rápido a la financiación para la construcción de barcos, la fabricación de equipos marítimos y para el desarrollo y suministro de combustibles sostenibles asequibles a escala, todo lo cual será necesario para alcanzar los objetivos globales.
• Para obtener más información sobre los compromisos de la industria de cruceros para reducir su huella ambiental, consulte cruising.org.
